El sábado día 4 de abril, los marinenses, todos, celebramos el CCXI Aniversario de la Liberación de nuestra villa, de la tiranía de las tropas francesas de Napoleón.

Y tuvimos que celebrarlo en una situación atípica e insospechada, que, seguramente, nunca hubiéramos pensado que podría suceder. En esta extrema situación, nos viene a la memoria el recuerdo, pasado de padres a hijos, de aquella pandemia de gripe del año 1918, mal llamada gripe española", en la que los marinenses sufrieron el azote de aquella epidemia con menos medios sanitarios, y de todo tipo.

Por eso hoy, ante esta horrible pandemia, de la que poco sabemos, y de la que mucho sufrimos, queremos y debemos, del mismo modo que recordamos los héroes de las "alarmas de Morrazo", recordar y aplaudir a todos aquellos que velan por nuestra salud: médicos, enfermeros, sanitarios, personal de servicios, fuerzas armadas, del orden: policía y guardia civil, policía local, protección civil, y todo aquellos que se dedican al cuidado de nuestros mayores, bien en residencias o en sus casas, porque de verdad que son los héroes de esta época, a todos nuestro agradecimiento y ánimo para seguir cuidándonos, sin olvidarnos de los distintos servicios que nos permiten seguir viviendo En la seguridad de que si fuimos capaces de superar aquella otra de 1918, ahora también la superaremos.

Por eso hoy debemos celebrar, aunque sea en nuestras casas. este atípico "Día de la Liberación", en recuerdo de aquellos otros marinenses que también, enfrentándose al ejército más poderoso del mundo, fueron capaces, con esfuerza, trabajo y sacrificio, salir vencedores del enemigo.

Por eso, ayer un año más, no podíamos faltar a nuestra anual cita con la historia, en la que llevamos cuarenta y cuatro celebrando, manifestamos nuestro recuerdo y agradecimiento a aquellos héroes que con su valor y heroísmo, nos liberaron del enemigo.

Magnífico ejemplo, en el que hoy, debemos mirarnos para imitarlos y unirnos para defendernos de la pandemia que nos confina y nos ataca sin piedad, para conseguir también vencerla, y pronto, como ellos, podamos grabar en letras de oro el lema: Honor, Gloria y Libertad. Honor por nuestro comportamiento cívico personal, Gloria para los que fueron nuestros mejores defensores y Libertad para poder movernos, para salir de casa, ir a una cafetería, al cine o darnos un paseo por la ruta del Lameira, por Castiñeiras o por nuestras playas. Y un recuerdo sentido para aquellos que nos dejaron por culpa del maldito virus. Animo a todos que, como hace doscientos once años.Venceremos.