El Ateneo sigue vivo a pesar de las crisis y de las cosas que pasan. A la asamblea apenas han asistido socios, y basta decir que sólo había cinco en el público frente a los seis directivos de la mesa. La respuesta no es muy alentadora aunque puede interpretarse de dos maneras: que los socios no tienen interés o que por contra, confían plenamente en la directiva. La buena noticia es que se ha rebajado la deuda global significativamente y que la "vida" continúa. Se amplían las actividades pero, en el transcurso de la reunión, se propuso y se aprobó que, a partir de ahora, quienes promuevan o asistan a cursos que se celebren en las dependencias propias, tengan que hacerse socios de número, al menos durante el tiempo que dure el curso, lo que ayudará al sostenimiento nada fácil del "entarimado". También se decidió en justicia, nombrar socios de honor 2014 al matrimonio formado por Luciano Santiago y Marina Esperón, y a la empresa Ceferino Nogueira y huelga señalar las merecidas las razones.