La Semana Santa es tiempo de celebración y, como en cada buena fiesta, la gastronomía se adapta a la ocasión. En Galicia, igual que en el resto del país, hay una serie de platos típicos que se cocinan de forma más habitual durante estos días.
La única característica común que tienen estos manjares es la ausencia de la carne. La abstinencia de este ingrediente se explica por la tradición católica y dura toda la Cuaresma, pero sobre todo se evita el Viernes Santo. La carne roja está prohibida porque representa el cuerpo de Cristo crucificado, así que los creyentes comen pescado en Semana Santa para cumplir con las Sagradas Escrituras, en las que tal como apunta el evangelio de Juan (21:5): "Entonces Jesús les dijo: Hijos, ¿acaso tenéis algún pescado? Le respondieron: No".
De esta forma se pretende honrar los deseos que tuvo Jesús en vida en el día de su muerte. Además, el pez tiene también mucho protagonismo en el evangelio de Lucas (9:13), en los que Jesús multiplica los panes y el pescado para un pueblo entero.
Bacalao a la gallega
Este plato, típico de Galicia, es una de las propuestas estrellas en muchos hogares. El protagonista es un buen bacalao que se prepara cocido, patatas, cebolla, pimiento, pimentón y aceite de oliva.
Empanada de vigilia
Es la empanada que se consume en Viernes Santo. Habitualmente se elabora con atún u otros pescados y mariscos para evitar que lleven carne roja.
Torrijas
Durante la Semana Santa, este postre tiene un significado especial. Al estar elaboradas con ingredientes básicos como el pan y la leche, representan la sencillez y la humildad, características que pueden relacionarse con la penitencia y la reflexión propias de este período religioso.
Buñuelos de bacalao
Esta otra elaboración con bacalao es también una de las opciones favoritas en estas fechas. En este caso, el pescado irá en migas y no entero. La forma de cocinarlo es completamente distinta, entre otras cosas porque hay que freírlos en vez de cocer.
Potaje de vigilia
Sin carne en el menú de Semana Santa, este potaje contundente con garbanzos, bacalao, espinacas y huevo cocido aportará las proteínas que necesitamos.
Sopa de ajo
Uno de los platos de cuchara más clásicos y austeros es también sano y nutritivo. Pan, huevos, ajo, pimentón, aceite de oliva y agua batan para elaborar otra receta esencial.
Patatas viudas
De nuevo, una receta sencilla pero riquísima, cuya clave está en el punto de cocción de la patata, el ingrediente principal. Cebolla, ajo, pimentón, perejil, aceite de oliva, sal y pimienta negra o blanca bastarán para preparar un plato muy vinculado a estas fiestas.
Bacalao ajoarriero
Otro tipo de elaboración distinta a las anteriores. Hay que cocinarlo con el sofrito típico de esta receta, que incluye verduras, tomate, ajo y pimientos, es una de las opciones típicas de estas fechas.
Tortillitas de camarones
Un plato tradicional de Cádiz que es ya muy popular en toda España. Con camarones, agua, sal, harina de garbanzo, cebolla y perejil podemos elaborar este original bocado.
Monas de Pascua
Los dulces tienen una enorme presencia en el recetario de la Semana Santa. Junto con las torrijas, las monas de Pascua son otra de las recetas estrella.
Leche frita
Aunque es un postre que se come durante todo el año, la leche frita también gana protagonismo en Semana Santa.
Pestiños
La lista de dulces asociados a estas fechas es inabarcable. Los pestiños, un postre con muchas variantes pero que se elaboran comúnmente con harina, aceite de oliva, vino blanco, anís y la cáscara de un limón, entra en la selección, aunque también incluya manteca de cerdo.
