Tamara García Romero (Guizán-Mos, 1994) se presenta en sus redes sociales asegurando: “Hago de todo, no destaco en nada”. Y no lo dice por decir, realmente lo cree, a pesar de ser uno de los rostros que más viene pisando fuerte en redes sociales. Con más de 323.000 seguidores en TikTok y 129.000 en Instagram, esta mosense de 27 años hizo reír a 5 millones de personas en todo el mundo con la broma que le gastó a su abuela diciendo que estaba embarazada. No ella, sino su abuela nonagenaria. Sus seguidores, pero sobre todo su buen humor, es un reclamo para las marcas, la nueva forma de hacer publicidad del siglo XXI, a la que también se ha apuntado la Xunta de Galicia, que la ha elegido, junto a otros influencers gallegos, como María Castaño o Cepeda, para promocionar el Camino de Santiago.

–En el perfil de tu agencia pone, a modo de anécdota, que tu primer trabajo fue a los 15 años como bailarina en un circo. ¿Cómo se da el salto del circo al TikTok?

–Pasaron bastantes cosas de por medio. Estudié Publicidad y Relaciones Públicas y Diseño de Moda y estuve trabajando tres años en Inditex de diseñadora. Luego con la pandemia todo cambió. Me hice TikTok y ahí empecé a subir vídeos. Tuve un vídeo muy viral que fue uno que hice a la salida del dentista, con media cara anestesiada. La anestesia me dio muchos seguidores. Seguí subiendo vídeos en TikTok e Instagram, sobre todo de humor, pero hago de todo, también bailo. Ahora me dedico a las redes sociales.

–¿Cuándo fue la primera vez que una marca llamó a tu puerta?

–Fue justo con el vídeo del dentista. Ya tenía unos cuantos seguidores en TikTok, pero ese fue sobre todo el empujón porque el vídeo se hizo viral y en un día pasé de los 11.000 a los 21.000 seguidores en TikTok; un cambio muy brusco, también en Instagram, donde tenía 1.800 seguidores y en tres días me puse en 13.000. Al principio las marcas me ofrecían colaboraciones gratuitas. De forma remunerada llevo un año dedicándome a esto.

Estudió Publicidad y trabajó como diseñadora para Inditex, pero un video suyo se viralizó y en tres días ganó más de 10.000 seguidores

–¿Cuál es tu fuente de inspiración para crear contenido?

–No me inspira nada en concreto. Muestro un poco como soy yo, hago las bromas que podría hacer con mis amigos. Mis vídeos representan muy bien como soy yo. No tengo ese momento de decir “tengo que crear, ¿qué puedo hacer?”, simplemente lo hago y ya está. Me nace.

–¿Te viene de familia ese buen humor?

–Yo creo que sí porque cada vez que saco a alguien de mi familia es una revolución. Mi familia es más influencer que yo. Yo solo soy el producto de la forma que han tenido de educarme tan alegre y optimista.

–Precisamente tu abuela es la protagonista de tu vídeo más famoso

–Mi abuela es una estrella en todos los sentidos. Con ella tuve otro tirón en redes con un vídeo que lo petó. Lo vieron en todo el mundo.

–¿Y qué te dice ella? ¿Entiende este trabajo?

–No. Mi abuela al final tiene 90 años y no entiende ni este trabajo, ni las redes sociales ni lo que ha pasado con el vídeo. Pero sí que es cierto que vivió esta historia como una fantasía.

–También parodias un poco el mundo de los influencers en tus vídeos…

–No pretendo ridiculizar a nadie, solo mostrar como lo hago yo, y resulta que, en como lo hago yo, se ve reflejada muchísima gente. A veces me llaman “la antiinfluencer”, pero tampoco es así, porque a mí también me gusta tener mi foto bonita y estar guapa, creo que es compatible. Me gusta ser honesta y tal y como lo hago lo muestro. Y creo que la gente lo agradece porque, en general, la tendencia en redes sociales está cambiando y ya no nos interesa ver lo perfecto. Creo que por eso está funcionando lo que hago, no hay tramas, es real. Sería una presión estar fingiendo todo el rato ser algo que no soy. Creo que he ganado más confianza en mí misma desde que tengo redes, porque es como abrazar lo real.

"Me gusta ser honesta y tal y como lo hago lo muestro. Y creo que la gente lo agradece porque, en general, la tendencia en redes sociales está cambiando"

Tamara García Romero - Influencer

–¿Cuál es la colaboración que más ilusión te ha hecho hasta la fecha?

–Es difícil elegir una. Lo guay es que hago cosas muy diferentes. Últimamente estoy haciendo trabajos de reportera. También me gusta mucho cuando las marcas confían en mí y me dejan total libertad para crear el contenido.

–Ahora mismo estás haciendo el Camino de Santiago junto a otros influencers como parte de una colaboración con la Xunta de Galicia.

–Es una pasada. Quien me iba a decir a mí que viajar y vivir esta experiencia iba a ser trabajo. Es trabajo porque al final estamos creando contenido todo el día, pero me siento una privilegiada.

–¿Qué planes tienes a largo plazo?, ¿quieres seguir dedicándote a las redes sociales?

–No pienso mucho en el futuro. Todavía flipo cada vez que me entra un mail. En este mundo no sabes quién puede llamar a tu puerta; cada vez las marcas hacen cosas más diferentes, estoy todo el rato haciendo de todo, que es lo que me gusta a mí. Actualmente tengo la agenda completita, estoy alucinando. Hay que aprovechar el momento y, si el día de mañana ya yo intereso a las marcas, yo también tengo mi formación.