La situación de las instalaciones de Ojea, y en especial la de la conocida como nave de Córdoba, cuyo deterioro y riesgo de derrumbe crece con los días, es uno de los asuntos que pretende tratar la alcaldesa de Cangas, Victoria Portas, en una reunión con la directora general de la Costa y el Mar, Ana María Oñoro. El encuentro está previsto para el día 12 de enero y se producirá vía telemática, debido a las restricciones por la pandemia de COVID-19, La regidora busca que el ente estatal resuelva las deficiencias o ceda la titularidad de las instalaciones para que pueda actuar el Concello, que carece de competencias para invertir en bienes ajenos. El resto de la explanada, incluido el “helipuerto”, también precisa de una urgente puesta a punto.

La urgencia deriva del estado casi ruinoso de la referida nave, con parte del techo desplomado y varios sillares de la estructura desplazados, lo que obligó a la Policía Local a precintarla y vallar el entorno. El Concello la utiliza como almacén de pertrechos y vehículos retirados de la circulación hasta el momento de llevarlos a achatarrar.

Por otra parte, Portas sigue esperando que el jefe del Servicio Provincial de Costas, Enrique Fernández Menéndez, cambie de parecer y autorice el acondicionamiento de la explanada trasera de la Casa do Mar de Aldán para mejorar el espacio de aparcamiento y habilitar una zona de petanca con dos campos de juego, tal como solicitó la asociación de personas mayores Ariño y tramitó el Ejecutivo cangués, aunque Costas informó desfavorablemente por encontrarse en dominio público marítimo-terrestre.