Los contagios por la COVID se disparan en la comarca de O Morrzo. Este fin de semana el virus repuntó con cifras para nada despreciables y que hacen, incluso, temer por la Navidad. En Cangas, ayer ya se superaban las 40 personas contagiadas, con una incidencia de 136 por cada 100.000 habitantes; Moaña llegaba a los 263 de incidencia, ya muy cerca del riesto alto, que se sitúa en las 300 personas por cada 100.000 habitantes; mientras en Bueu la incidencia acumulada alcalza los 233.
El jefe de Servicio del Centro de Salud de Cangas, el doctor Benigno Villoch, apuntaba que solo el viernes pasado se registraron 14 positivos, 7 el sábado y 4 el domingo. Asegura que los contagios obedecen a personas que esperan cuatro o cinco días en acudir a un médico o a hacerse una prueba porque consideran que se trata solo de un catarro, porque insisten en que están vacunados. “Son personas que tarda en llegar porque conisderan que solo tienen un catarro. Hasta el quinto día no llegan ni se hacen pruebas y en ese tiempo la COVID aprovecha para propagarse. No se dan cuenta que la vacuna no protege del contagio, que sirve solo para que no sea tan virulento. De hecho, todas las personas que dieron positivo el viernes estaban vacunadas. Si es verdad que no presentaban más sintomas que los de un catarro. Lo que pedimos es que no esperen, que a los primeros síntomas de un catarro que acudan al médico, a Urgencias o se hagan pruebas en las farmacias o en camión que está ubicado en el Náutico de Vigo. Es la manera de que evitar que suban de manera exponencial los contagios. Cuando antes se detecten antes se puede aislar al enfermo”, apunta Benigno Villoch.
El jefe de Servicio comenta como muchos enfermos a los que las pruebas les dan positivo no lo creen e insisten en que debe tratarse de un error. No se entiende como no se hacen pruebas para detectar la presencia del virus cuanto antes, ahora que hay medios suficientes.
Benigno Villoch considera que si se mantiene este ritmo las Navidades van a peligrar, porque las medidas restrictivas que impuso la Xunta de Galicia se adoptaron con niveles de incidencia mucho más bajos que los actuales. También indica que los pacientes con COVD de esta sexta ola son de todas las edades. Si bien, considera que se garantizó que el grupo de riesgo esté bien vacunado.
