Malta ha sido el escenario del reinicio de los encuentros internacionales de arte efímero después de la pandemia sanitaria, una vuelta en la que Galicia y Bueu han estado presentes de manera más que destacada. Cinco alfombristas gallegas, de las que cuatro son de la localidad de O Morrazo, participaron desde el jueves y hasta ayer en un congreso en la localidad de Gharb. Estaba organizado por la asociación EspresjonArti Gharb, en el marco de las actividades de la Coordinadora Internacional de Entidades de Alfombristas de Arte Efímero.
El congreso solo podía culminar con la elaboración de una alfombra, que ocupó una superficie de más de 20 metros cuadrados, en la que Bueu dejó algunas de sus señas de identidad, como el uso de conchas de berberecho, vieira o zamburiña.
El encuentro supone el regreso a eventos presenciales a nivel internacional después de 18 meses. Por ello el lema elegido para alfombra fue “Restart”, una palabra en inglés que significa reinicio. Para que este primer paso en la vuelta a la normalidad fuese lo más seguro posible solo participaron tres entidades: Inverdurata de Pachino y CulturArte de Noto –ambas italianas– y la federación gallega, representada por una alfombrista de Asociación Ondiñas Mainas de Rianxo y cuatro de Bueu: María del Carmen Rodríguez, Loli Docampo y sus dos hijas. “Llevamos concha, tanto entera como molida. Llamó mucho la atención nuestro uso de las concha de berberecho y zamburiña que estaban pintadas de color dorado, que la organización decidió colocar en un lugar destacado de la alfombra”, manifiestan desde la directiva de la federación gallega.
