La Policía Local de Bueu brindó ayer una despedida al agente que hasta la fecha llevaba más años en activo: Antonio Martínez Blanco, que se acaba de jubilar tras 37 años de servicio y todos en Bueu. “Empecé justo después de acabar el servicio militar y pasé toda mi vida laboral aquí”, explicaba ayer. Sus compañeros, junto con otros antiguos agentes con los que trabajó y que ya están jubilados, celebraron ayer una comida de despedida en el restaurante Estrellita y le entregaron una placa de recuerdo.
El ya expolicía es natural de Redondela, aunque reside en Mos, y se jubiló a principios del verano. “Empecé en mayo de 1984, cuando el jefe aún era Gabriel Abril. Primero estuve un periodo de seis meses y luego me presenté a las pruebas de selección que había”, cuenta. Tuvo que superar una prueba teórica y otra de carácter práctico, que en aquel momento consistía en completar un circuito con una Vespa delante de la Praza do Concello. “La mía, junto a la de José Garrido [jubilado en 2019] fueron las últimas incorporaciones para cubrir jubilaciones; las plazas que vinieron después ya fueron de nueva creación”, explica Martínez Blanco. Para los siguientes relevos por jubilación hubo que esperar hasta finales de 2020, precisamente a raíz de la ley que aprobaba la jubilación anticipada para los policías.
“Me voy contento. La relacióncon los compañeros siempre fue excelente y la gente de Bueu me trató bien”, asegura Antonio Martínez. Casi 40 años de servicio dan para mucho y muchas veces toca enfrentarse al lado más difícil de la vida. “Los peores momentos siempre son aquellos en los que hay accidentes o sucesos con personas fallecidas, son muy difíciles de llevar”, sentencia el ya exagente de la Policía Local de Bueu.