La promotora Playa Lanzada denunció ante la Guardia Civil de Cangas el hecho de que las vallas del edificio que construye en Vilariño (O Hío) aparecieran por la mañana desprendidas de sus enganches y desperdigadas por la zona. Los trabajos habían empezado con el estudio geotécnico. Se trata del polémico edificio que dividió al gobierno en el mes de enero al votar el PSOE y Aurora Prieto (ACE) a favor, mientras el resto de esta formación política que ostenta la Alcaldía de Cangas votó en contra: la regidora local Victoria Portas y el concejal de Facenda, Mariano Abalo. Fue aprobada tras los informes técnicos municipales a favor, razón por la que tanto Aurora Prieto como los concejales socialistas dentro de la junta de gobierno decidieron votar a favor de la licencia municipal. El retraso en la concesión de esta licencia, que hay había llegado a la mesa de la junta de gobierno en numerosas ocasiones, obedecía a que Avante! ahora, antes bajo las siglas de ASpUN, mantenía paralizada la concesión por considerar que un edificio en la zona no era compatible con las Normas Subsidiarias de Planeamiento y también porque el informe de antigüedad sobre el polémico hórreo que hay en la parcela fuese realizado por una arquitecto supuestamente ligado a la empresa promotora.
Pero el edificio no solo es polémico porque dividió al gobierno local en un momento crucial, cuando se realizaba la transición entre el fallecimiento de Xosé Manuel Pazos y el nombramiento de Victoria Portas como alcaldesa, sino que la empresa denunció por prevaricación a toda la junta de gobierno del anterior mandato, denuncia que fue archivada por el Juzgado Número 1 de Cangas.
