La Mancomunidade do Morrazo recibió ayer las 9 biotrituradoras que este organismo supramunicipal pondrá a disposición de los vecinos en servicio de préstamo domiciliario en los próximos meses. Se trata de maquinaria valorada en 2.169 euros que permitirá a los vecinos tratar en sus domicilios los restos de poda que generen y, de esta forma, disponer del material estructurante necesario para el óptimo funcionamiento de sus composteros individuales.
Al acto de recepción acudieron, además de la presidenta de la Mancomunidade, Leticia Santos, las maestras composteras del organismo.
En estos momentos la Mancomunidade trabaja en una ordenanza reguladora que establezca las normas a las que deberá ajustarse el préstamo de las biotrituradoras, determinando los derechos y obligaciones de los usuarios. Una vez aprobada, estarán disponibles en las dependencias de los tres Concellos en donde podrán ser recogidos por los vecinos que cuenten con un compostero individual.
El objetivo es profundizar en el programa de compostaje, que se realiza tanto de forma individual en casas unifamiliares como a través de los composteros colectivos que hay instalados en distintos barrios urbanos de la comarca para su uso por los residentes en pisos.
Con este tipo de ayudas a los vecinos se quiere evitar que los residuos orgánicos acaben en el circuito de recogida de basura y lograr así un ahorro en su gestión, y es que los restos de podas pueden usarse como estructurante o como material de acolchado para una huerta o jardín. Asimismo, se pretende reducir el número de quemas de este material minimizando los riesgos de incendio y la contaminación ambiental.
Ayuda
Las biotrituradoras fueron suministradas gracias a una subvención de la Consellería de Medio Ambiente destinada a la gestión de residuos de competencia municipal. A la Mancomunidade do Morrazo la Xunta le concedió 199.787,94 euros destinados a actuaciones de prevención, recogida separada y valorización de los biorresiduos.
La presidenta de turno de la Mancomunidade y alcaldesa de Moaña, Leticia Santos, explica que actualmente se están ampliando los centros de compostaje comunitario en Bueu y Cangas. Esta ampliación concluirá con la instalación de 22 cajones de estructurante, fundamental para el correcto proceso de compostaje.
Tanto reducir la enorme factura del tratamiento de los residuos sólidos urbanos en la planta de Sogama en Cerceda como acercarse a los objetivos de tratamiento de la basura establecidos por las directivas europeas son las metas que guían las acciones de los Concellos y de la Mancomunidade a este respecto.
