El cierre de la piscina municipal de Cangas, "A Balea", es el resultado "de cinco años de desastrosa gestión de esta instalación deportiva de referencia", aseguran desde el grupo municipal del PP, que responsabiliza al alcalde, Xosé Manuel Pazos, de este situación y le exige su inmediata "reparación y licitación" de acuerdo con la ley.
"Llevamos años denunciando publicamente la mala gestión y reclamando el mantenimiento de esta infraestructura y ahora utilizan esas deficiencias provocadas por su incompetencia para cerrarla" arremeten los populares, que también reprocha un modelo de gestión "en el que se pagan 23.000 euros más IVA al mes a una empresa por prestar el servicio", al margen del número de usuarios que tenga y sin exigencias de mantenimiento, " asumiendo las arcas municipales los principales costes", como el consumo energético.
Añaden desde la formación que la empresa que estaba prestando el servicio lo hacía "en la alegalidad, con un contrato caducado y una prórroga indefinida que se prolongó más tiempo que el propio contrato". A este hecho suman la "anulación de la licitación por irregularidades, medida que "ni recurrieron ni pusieron en marcha una nueva. Demasiado trabajo" ironizan.
También recuerdan los representantes del PP que, durante la campaña electoral, los representantes del actual gobierno acusaron al BNG de ser culpable "de incumplir la famosa promesa de municipalización de la gestión, que sigue sin cumplirse cinco años después", por lo que entienden que "ya no existen dichas trabas para cumplir ese compromiso, aunque nos tememos que nos sorprenderán de nuevo con alguna burda excusa para tratar de ocultar lo que ya todos sabemos que era mentira" afirman.
Remachan afirmando que el bipartito "ya pidió un informe por 10.000 euros en la pasada legislatura sobre el modelo de gestión y aún así siguen enredando a costa de los bolsillos de los vecinos y vecinas" con nuevos informes.
