El presidente de la Asociación Vellez Digna, de usuarios de residencias de mayores, el cangués Xosé Bernárdez Solla, respecto al auto del Juzgado de Cangas de sobreseimiento de la primera denuncia contra cuatro centros del gruo DomusVi, entre ellos Aldán (Cangas), asegura que aunque lo acatan, discrepan de las excesivas formas empleadas, que no lo van a recurrir porque se les exige abogado y procurador y no van a emplear el dinero de la asociación, pero siguen insistiendo en que hubo indicios de delitos de abandono, negligencia o denegación de auxilio y que seguirán pidiendo que la justicia actúe de oficio. Critican que en el auto dictado por el Juzgado de Cangas con el sobreseimiento de la investigación, se "ensaña" con este colectivo, "sin motivo".

Cree que el Juzgado resuelve sobre un asunto que no iba dirigido a Cangas, sino a la Fiscalía Superior de Galicia, "por lo que no entendemos que lo paralice ". Añade que, además, el juzgado resolvió un asunto que excede el ámbito territorial ya que se denunciaron a cuatro residencias del grupo DomusVi (Vigo, Cangas, Santiago y Carballo), y, por lo tanto "no compete" resolver sobre ello únicamente a este juzgado, solo sobre la parte de la residencia de Aldán, en Cangas.

En cuanto al argumento del auto de que "faltan datos y hechos concretos" para abrir una investigación de oficio, dice que desde su parecer sí hay hechos concretos de indicios de delitos de abandono, negligencia o denegación de auxilio, con el resultado, al menos, de 26 muertos en Aldán y de 24 en Barreiro (Vigo). Señala que en las dresidencias enunciadas no se realizaron desinfecciones, ni limpiezas adecuadas, ni se aplicaron medidas adicionales recomendadas por Sanidade; tampoco se reforzó el personal de atención directa, a pesar de ser indispensable para aplicar correctamente los protocolos que desde la administración sanitaria se iban recomendando; que se puede entender que al principio es una negligencia, pero cuando ésta es reiterada en el tiempo y con unas consecuencias tan graves, se puede considerar una conducta dolosa. Añade que cada día que pasa se está perdiendo capacidad probatoria en las residencias y con la lentitud de la justicia y la no investigación, lo único que se consigue es que que el grupo empresarial gane más tiempo para deshacerse de las pruebas. Saben por la prensa que las fiscalías tienen investigaciones abiertas pero, "por lo menos en Aldán o en Barreiro no están tomando declaración a nadie, ni van a las residencias a comprobar aún nada".

Bernárdez Solla no entiende un auto que ante la gravedad de lo que ocurre, ordene el sobreseimiento sin practicar unas mínimas comprobaciones, ni siquiera llamar a declarar al personal de la residencia, Sergas o familiares.

Califica de "desafortunadas" las expresiones que se recogen en el auto hacia ellos como exigir "el mínimo respeto a los fallecidos". No acepta que denunciar la presunta negligencia en estas residencias sea una falta de respeto y considera que en el auto se les trata con "hostilidad", cuando asegura que los ciudadanos deben de buscar amparo en la justicia "y cuando acudimos a ella, nos consideramos insultados y maltratados". Aclara que trasladar una información a la Fiscalía, no les debe convertir en enemigos de la justicia, ni en peligrosos delincuentes.

Sobre la falta de medios, dice pudo haber también en otros ámbitos, pero la de personal "no nos parece tan excusable" .