Dos años y ocho meses después del virulento incendio que arrasó la Nave A de Fandicosta en sus instalaciones de Domaio, la mayor empresa de Moaña dejó atrás su etapa más dura de reconstrucción y en estos momentos logra facturar ya 120 millones de euros, según los datos con los que cerró el ejercicio 2018. Tras invertir 25 millones de euros en la reconstrucción, en estos momentos Fandicosta exporta al exterior el 60% de sus ventas, y sus productos del mar congelados llegan a 34 países y más de 25.000 puntos de venta. Europa, Brasil o México son sus principales mercados.
Estos fueron los datos desvelados por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, tras mantener ayer una reunión con la dirección de la empresa y visitar las nuevas instalaciones en una ruta que las autoridades completaron con batas blancas, gorras y unos auriculares que explicaban las distintas dependencias a modo de visita turística. Eso sí, Feijóo solo se puso la gorra en las dependencias con estricta obligación, apostando por quitársela para los reporteros gráficos.
El presidente puso en valor la rapidez en recuperar el volumen de facturación anterior al fuego, así como "o traballo feito. O máis doado sería pechar tras o incendio. Pero a empresa tomou a decisión de facer o máis difícil e cumprindo todos e cada un dos compromisos cos proveedores, coa plantilla, cos clientes, coa calidade dos produtos e coas exportacións". Aplaudió que la empresa "convertera nunha oportunidade un incendio dramático".
Más allá de su recuperación, "que demostra o espírito de superación de persoas como o presidente da compañía, Ángel Martínez, e a plantilla", la empresa cuenta con un plan estratégico de crecimiento a través del que espera llegar a facturar 150 millones en tres años. Este crecimiento se ve en el número de trabajadores que operan desde las instalaciones de Domaio, que asciende ya a 190, unos 20 más que en el momento del incendio. Ante la dirección de la entidad, Feijóo consideró que la gestión de la reconstrucción tras el fuego debe pasar a estudiarse como "un modelo para superar as crises que deben tomar como exemplo todas as empresas de Galicia". Explicó cómo la compañía logró mantener la producción y cumplir los compromisos con el escaso espacio de las dos naves que no fueron afectadas por el incendio. "Mentres tanto, xestionou a retirada de centos de toneladas de peixe fulminadas polo lume, buscou unha licenza para construir, e xestionou cos seguros".
La visita, en la que Feijóo estuvo acompañado por el presidente de la empresa y por los conselleiros de Economía -Francisco Conde- y de Mar -Rosa Quintana- comenzó por la planta alta de la nueva nave. Se trata del espacio para oficinas, con unos 20 trabajadores y dividido en cinco salas de reuniones, despachos de comerciales, departamento de compras y los despachos de la dirección. Los ventanales hacia la cara norte y hacia la ría de Vigo, así como las paredes de cristal que separan las dependencias, llamaron la atención.
La ayuda pública que recibió la empresa ascendió a tres millones. Desde Economía aseguran que se hacen frente a los pagos de los plazos sin retrasos. Feijóo aprovechó este ejemplo para anunciar que antes de finalizar el mes de marzo la Xunta publicará 30 líneas de ayuda para el tejido económico y empresarial gallego. En total se repartirán 100 millones de euros para conceptos como la promoción del empleo autónomo, la modernización tecnológica o la mejora de los parques empresariales. La digitalización de las pemes cuenta con 70 millones de euros de ayudas.
