Organización, planificación y negociación. Son los tres pilares que han motivado la creación de la primera plataforma de empresas auxiliares de Hijos de J. Barreras, afectadas tanto por impagos como por la interinidad en la dirección y la declaración de preconcurso. Auspiciada por la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Galicia (Asime), son "una treintena" las firmas que se han adherido a este colectivo, constituido este viernes. La conclusión es simple: existe "buena voluntad y disposición" a volver al trabajo, tanto a bordo del buque de Ritz-Carlton como a los cruceros de Havila Kystruten, pero solo si existen "garantías de pago" sobre las deudas vencidas, las tareas ya realizadas y las pendientes. La plataforma contará con Alberto Rocha como letrado asesor y portavoz.
Como resumió a FARO el secretario general de Asime, Enrique Mallón, la deuda con las auxiliares es "una cantidad pequeña" teniendo en cuenta el valor de los pedidos, "pero puede ser de vida o muerte para algunas empresas". El grueso de las subcontratas -fuentes del sector indican que ha habido 83 firmas en el astillero en las tareas de construcción de los tres barcos- son de muy pequeña dimensión. La rescisión de contratos de obra o servicio y la anulación de pedidos de materiales han sido dos de las estrategias que han utilizado para reducir su exposición a la crisis de la compañía viguesa. Pese a todo, y a juicio de Mallón, la plataforma considera "factible" terminar el crucero de ultralujo en un "plazo razonable, y a un precio razonable también para el cliente". Pese a que el cese de José García Costas se ejecuto el 26 de septiembre, y que el astillero quedó sin gobierno, The Ritz-Carlton decidió marcar el 14 de junio próximo como fecha inaugural del Evrima.
"La solución debe ser ágil", advirtió Enrique Mallón. "Si esto se dilata en el tiempo, y con las empresas sin material ni empleados, no será tan fácil retomar la actividad". La plataforma avanzó asimismo su intención de mantener reuniones, a partir de la semana que viene, con Xunta, Pemex (accionista mayoritario del astillero, con el 51% del capital social) y con Ritz-Carlton "para intentar llevar a cabo la construcción de los barcos que hay en cartera". La falta de interlocutor en Barreras, sin director general desde hace más de una semana, es una cuestión todavía a resolver.
