Cuatro personas murieron ayer por la tarde en Berlín, entre ellas un bebé, al invadir un coche deportivo una acera a gran velocidad en el céntrico distrito de Mitte. Según las autoridades alemanas, el vehículo, de la marca Porsche, habría provocado de modo involuntario lo que calificaron de "grave accidente de circulación". La prensa local aseguró que el objetivo de esta calificación es eliminar de raíz cualquier posible especulación sobre una intencionalidad terrorista de los hechos. La capital alemana sufrió un grave atentado islamista en la Navidad de 2016 cuando, el 19 de diciembre, un camión se abalanzó contra un mercadillo navideño, matando a once personas y causando heridas a otras 56 en el distrito de Charlottenburg. Según el diario "Bild", que fue el que adelantó que entre los muertos figura un bebé, el conductor del vehículo y su acompañante resultaron heridos en el accidente.