El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aclaró ayer que la oficina que abrirá en Jerusalén tendrá carácter comercial, para promover la tecnología y la innovación, como parte de la embajada en Tel Aviv.

"Nos aproximamos a países que están alineados con nosotros en las tradiciones, la cultura, la democracia, y la fe en Dios. Abriremos en Jerusalén una oficina para promover el comercio, la inversión, la tecnología e innovación", desveló en una rueda de prensa con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.

Horas antes, el titular de Exteriores, Israel Katz, había anunciado en sus redes sociales que Brasil abriría una sede diplomática en Jerusalén, siguiendo el criterio de EE UU.