Las elecciones regionales disputadas el domingo en la región italiana de Los Abruzos (centro del país) han puesto de manifiesto que la ultraderechista Liga sigue siendo el partido que más réditos le saca a su coalición de Gobierno con los antisistema del M5S.
El bloque de derechas (Liga, Forza Italia del ex primer ministro Berlusconi y neofascistas de Hermanos de Italia) se impuso con el 50% de los votos. Dentro del bloque, la Liga fue el partido más votado (28%), doblando sus resultados de las elecciones generales de 2018 y confirmando que ha desbancado a Forza Italia a la cabeza de la derecha.
La candidata del M5S obtuvo un 20,2% por ciento de los votos, cuando en las pasadas legislativas su grupo logró un 40% en la región. Pese a que una cita no es comparable con la otra, la pérdida de 200.000 votos refleja que el M5S está llevando la peor parte en su insólita alianza con la ultraderecha de Matteo Salvini. El candidato del centro izquierda, formado por el Partido Demócrata (PD) y otros grupos, se quedó en el 31,3%.
"Gracias Abruzos. Gracias Italia", tuiteó un exultante Salvini, que presumió de crecerse frente a las críticas. "Más fuerte que los ataques, las mentiras y la polémica: trabajaremos desde mañana", añadió el "hombre fuerte" y ministro del Interior del gabinete de coalición.
