El ultraderechista Jair Bolsonaro encabeza los sondeos para la segunda vuelta de las presidenciales brasileñas, que se celebrarán el 28 de octubre, con un 58% de la intención de voto, frente al 42% del izquierdista Fernando Haddad, candidato del Partido de los Trabajadores (PT) y heredero del expresidente encarcelado Luiz Inácio Lula da Silva.
La primera encuesta tras la elección del pasado domingo, en la que Bolsonaro cosechó el 46,03 de los sufragios, confirma que el líder ultra es el gran favorito para ser el próximo presidente de Brasil. El pronóstico de la firma Datafolha lo avalan los resultados electorales de los últimos treinta años: nunca, desde el final de la dictadura en Brasil, el vencedor de la primera vuelta no lo ha sido, también, de la segunda
Según las simulaciones para una segunda vuelta realizadas antes de la votación del domingo, los dos candidatos estaban técnicamente empatados, con cerca del 45% de las preferencias.
Bolsonaro está tan confiado en sus posibilidades que ayer se permitió descreer de la primera encuesta que le da la presidencia de Brasil. Eso sí, cuestionando, de paso, el respaldo que el sondeo otorga a Haddad.
A través de las redes sociales, su canal de comunicación preferido, se preguntó: "¿De dónde viene?", en referencia al apoyo otorgado por la demoscopia al candidato de Lula, que el domingo recibió un 29% de los votos.
Bolsonaro instó a sus seguidores a "seguir trabajando" hasta el 28 de octubre y reiteró su desconfianza en el sistema electrónico de votación, sobre el cual ha dicho más de una vez que puede ser manipulado y permitir "fraudes".
Haddad, por su parte, visitó la Conferencia Nacional de Obispos (CNBB), lo que fue interpretado como un acercamiento al electorado católico para contrapesar el fuerte apoyo que el líder ultra ha logrado entre las influyentes iglesias evangelistas.
El candidato del PT subrayó que su programa de gobierno contempla la agenda que propone el Papa Francisco, que apunta a "fortalecer la democracia, la protección del medio ambiente y la cuestión social".
La CNBB no se ha pronunciado en favor de ningún candidato, pero ha instado a los católicos a votar en aquel que encarne los valores citados por Haddad.
Además, el delfín de Lula recibió el miércoles el apoyo, aunque "crítico", del Partido Democrático Laborista (PDT), la formación que presentó a Ciro Gomes, que fue el tercer candidato más votado el domingo, con el 12,47% de los sufragios.
Entre tanto, el presidente de la fuerza que lidera Bolsonaro, el Partido Social Liberal (PSL), Gustavo Bebianno, descartó que vayan a privatizar Petrobras a corto plazo. "No puedes meterte con Petrobras porque es un bien público y tiene que ser tratado como tal", dijo, pero añadiendo que la compañía "necesita una limpieza".
