El servicio nacional de salud británico (NHS, por sus siglas en inglés) recibirá el equivalente a 22.800 millones de euros más al año como "regalo" por su septuagésimo aniversario, afirmó ayer la primera ministra británica, la conservadora Theresa May. La "premier" adelantó que esta financiación extra provendrá en parte de un "dividendo del 'Brexit'", que estará disponible cuando Londres deje de pagar su aportación al presupuesto de la UE. Para conseguir el resto del dinero, May anunció que recurrirá a una subida de impuestos.