La Policía de Finanzas italiana detuvo ayer al alcalde de Venecia, Giorgio Orsoni (PD), y a otras 34 personas bajo la acusación de corrupción relacionada con la construcción de "Moisés", el complejo sistema de diques para frenar las inundaciones regulares que sufre la ciudad italiana.

El faraónico proyecto, que se inició hace siete años y que cuenta con una financiación pública de 5.000 millones de euros, es una ocasión ideal para obtener un beneficio no lícito, según las conclusiones avanzadas por la fiscalía de Venecia, que ordenó las detenciones.

Financiación ilegal

Entre los que recibieron la orden de detención en su domicilio se encuentra el alcalde de la ciudad, del centroizquierdista Partido Demócrata (PD), elegido en el año 2010 en las filas de una coalición de ese color político.

A Giorgio Orsoni se lo hace responsable de haber recibido cerca 110.000 euros de financiación ilegal para su campaña de las elecciones municipales por parte de esta red de corrupción.