El presidente de Bolivia, Evo Morales, proclamó ayer el inicio oficial de su campaña para buscar la reelección en los comicios del 6 de diciembre próximo, tras promulgar la ley que garantiza las elecciones generales.

“Este movimiento político, este Gobierno de los movimientos sociales debe garantizar el triunfo el 6 de diciembre de este año y arrancamos aquí la campaña con a miras a diciembre”, dijo Morales en un discurso ante sus seguidores reunidos a las puertas de Palacio.

Morales, que asumió la presidencia de Bolivia en enero de 2006, intentará revalidar su mandato para seguir gobernando en el periodo 2010-2014 y poner en marcha las reformas políticas y económicas aprobadas en la nueva Constitución en vigor desde febrero pasado.

Horas antes de promulgar la ley electoral, Morales suspendió una huelga de hambre iniciada hace seis días en el Palacio de Gobierno, después de que el Congreso sancionara la norma tras maratonianos debates y desencuentros que mantuvieron en suspenso al país.

Morales explicó que decidió ponerse en huelga de hambre en protesta contra “los restos del modelo neoliberal” que, a su juicio, todavía intentan frenar los cambios en el país.

El mandatario también destacó que alcanzar un 90 por ciento de respaldo en los comicios generales “no está lejos” pero se requiere la “conciencia del pueblo “.

El último sondeo de intención de voto publicado por medios bolivianos hace dos semanas otorga a Morales un 38 por ciento de respaldo.

No obstante, esa cifra refleja un ventaja amplia sobre el 9 por ciento asignado al segundo en los sondeos, el ex presidente Carlos Mesa (2003-2005), quien, sin embargo, no ha confirmado aún su candidatura.