Un convoy de fuerzas extranjeras se enfrentó con una patrulla policial afgana por error en el distrito de Anar Darah anoche, según el vicegobernador de la región, Younus Rasuli.

Ambos bandos iniciaron un tiroteo que duró unas cuatro horas, y finalmente las tropas extranjeras bombardearon la zona y acabaron con la vida de nueve agentes, según Rasuli.

Una fuente oficial, citada por la agencia PAN, responsabilizó del ataque a la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF), bajo mando de la OTAN.

"Tuvo lugar un enfrentamiento, en el que ambas partes pensaban que su contrincante eran los talibanes", señaló.

"Las fuerzas afganas pidieron apoyo aéreo, y la ISAF bombardeó un puesto policial y mató a nueve policías", añadió.

La ISAF no ha emitido ningún comunicado sobre los combates librados en Farah.

Sin embargo, sí que ha difundido una nota en la que lamenta la muerte "accidental" por fuego de mortero de al menos cuatro civiles.

Según el comunicado, las tropas de la ISAF lanzaron anoche fuego de mortero que se desvió un kilómetro de su objetivo en la provincia oriental de Paktika, tras lo cual varios civiles heridos se presentaron ante la base de la OTAN en la zona para pedir auxilio.

Los enfrentamientos entre las fuerzas internacionales y afganas y la insurgencia talibán son constantes en el país, especialmente en el tercio meridional, donde predomina la etnia pastún, la propia de los talibanes.

En Afganistán han muerto en lo que va de año víctimas de la violencia más de 2.100 personas, entre ellas 700 civiles.