La explosión se produjo ayer, miércoles, en la Mina de Carbón Yujialing (en la provincia septentrional de Shanxi), cuya licencia de producción había expirado con anterioridad.

Un total de 106 mineros trabajaban en el pozo en ese momento, de los que 80 consiguieron escapar con vida, aunque uno de ellos resultó herido de gravedad y reciben atención médica.

Los otros 26 mineros, que quedaron atrapados en el yacimiento, murieron.

La policía mantiene retenidos al propietario de la mina, Zhou Xiaogen, al director, Li Mingshun, y a otros responsables del pozo, que no contaba con las apropiadas medidas de seguridad.

El pozo tenía una capacidad de producción anual de 150.000 toneladas de carbón, aunque la licencia de producción, que había expirado, señalaba sólo 90.000 toneladas al año.

Se trata del segundo accidente grave que se registra en 10 días en Shanxi, uno de los principales centros de producción de carbón de China, después de que 21 mineros murieran en la ciudad de Jincheng el pasado 18 de marzo en un accidente ocultado por el propietario del pozo.

China registra el 80 por ciento de las muertes en el sector del carbón en el mundo, con 5.286 muertos en el 2006, de los 7.557 que perdieron la vida en total en las minas del país asiático, en el que el carbón supone 70 por ciento del consumo energético del país.