El inesperado "plantón" de los norcoreanos, precisamente cuando se pensaba que el diálogo a seis estaba en su mejor momento, obligó a cancelar la agenda de esta tarde, según explicó un representante japonés -que pidió no ser identificado- a medios de comunicación extranjeros.

Pyongyang asegura que hasta que no reciba los 25 millones de dólares congelados por EEUU en el Banco Delta Asia (BDA) de Macao no cerrará su reactor nuclear de Yongbyon, primer paso en su desnuclearización, aunque no ha dicho nada sobre un "boicot" al diálogo a seis.

Estados Unidos indicó ayer que el problema del dinero congelado estaba ya resuelto, después de que se acordara transferirlo a una cuenta norcoreana en el Banco de China, del que podría disponer Pyongyang en un plazo no revelado.

Fuentes bancarias macaenses aseguraron a la agencia norcoreana Yonhap que la transferencia se efectuará mañana, lo que puede retrasar aún más el proceso negociador.

Los otros cinco países implicados en el diálogo (EEUU, Rusia, Corea del Sur, Japón y China) desean "pasar página" en torno al asunto del dinero, y obligar a Pyongyang a que se centre en los pasos para el cierre, sellado y desmantelamiento de sus reactores.

Además, quieren que permita cuanto antes el regreso de inspectores del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) y dé toda la información sobre su programa nuclear, incluida su supuesta actividad de enriquecimiento de uranio (susceptible de ser usado con fines militares).

Las cuentas norcoreanas en el BDA fueron congeladas durante 19 meses (por petición de EEUU a las autoridades macaenses) al ser acusada la entidad financiera de ayudar a Pyongyang en el blanqueo de dinero procedente de actividades como el contrabando de armas.

La semana pasada el Departamento del Tesoro norteamericano levantó la congelación de fondos pero prohibió a bancos estadounidenses llevar a cabo negocios con el BDA.