Dentro del proyecto Autopilot que financia la Comisión Europea, uno de los objetivos es analizar la capacidad de los vehículos dotados con sistemas de conducción automatizada para estacionar y desaparcar de forma totalmente autónoma y sin riesgo para peatones y el resto de los vehículos. El CTAG utiliza su propio parking interno en Porriño para las primeras pruebas.