¿Hasta cuando vale la pena mantener el seguro a todo riesgo?

Una de las primeras cuestiones que debemos tener en cuenta cuando nos compramos un coche es contratar un seguro que nos cubra los diferentes daños en el vehículo. En el mercado existen diferentes opciones que se ajustarán a lo que más nos convenga en función del tipo de coche que tengamos, de los años o del uso que le demos al vehículo.

Los conductores suelen dividirse entre los que contratan un seguro a todo riesgo o los que prefieren uno a terceros, pero ¿cuál de los dos nos compensa más? Te traemos la respuesta.

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Los seguros a todo riesgo, que incluyen la cobertura por daños propios, son muy caros y la diferencia con un seguro a terceros puede llegar a ser muy elevada. Merecerá la pena pagar esa diferencia mientras el vehículo goce de cierto valor, fundamentalmente en coches de gama alta. A medida que pasan los años nuestro coche va perdiendo valor, un factor a tener en cuenta a la hora de mantenerlo.

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Según la OCU, lo más normal es que al sexto año ya no interese económicamente tener un seguro a todo riesgo. Entre los cuatro y seis años, el valor de nuestro coche puede haberse desplomado a la mitad, por lo que este es un buen momento para dejar nuestro seguro a todo riesgo para dar paso a uno a terceros.