España ha logrado recortar las reducciones de cuotas que proponía la Comisión Europea para la merluza de aguas ibéricas y para el jurel de la zona IX (de Fisterra al sur). La conselleira de Mar, Rosa Quintana, ha explicado que en el primer caso se consiguió pasar del tijeretazo propuesto del 20% a un 10% menos; en el caso del jurel, se ha logrado que el cupo sea el mismo que este año, ya que desde Bruselas proponían una drástica bajada del 50%.

Según ha indicado Quintana, en el caso del jurel todavía "se puede apostar por unas posibilidades de pesca mayores" que un statu quo en función de lo estimado por los propios científicos. "Hubo avances con respecto a la propuesta de ayer, pero no nos parece suficiente", ha concretado.

En el caso de merluza sur (es decir, en las zonas IXa y VIIIc, entre Golfo de Cádiz y País Vasco), desde Galicia y España se piensa que "hay posibilidades de recuperar la biomasa del stock manteniendo el mismo TAC [total admisible de capturas] del año pasado".

Mientras, para la merluza de Gran Sol el Reino Unido (en la que se espera sea la última participación en este tipo de reuniones tras el Brexit) se ha unido a la propuesta de Galicia para "mantener el stock sin perjudicar la parte social y económica", es decir, sin el recorte del casi 20% propuesto. "Esperamos alianzas con otros países", ha recalcado Quintana.

El jurel y la merluza son las dos especies "más amenazadas" por la propuesta de cuotas de Bruselas, que dejaría un perjuicio económico en España de 55 millones de euros solo en ventas. En Galicia, el daño al conjunto de la economía ascendería a 90 millones.