El juzgado de instrucción número 3 de Pontevedra abrió ya diligencias previas a raíz del accidente marítimo que costó la vida a estos tres marineros en el entorno de la isla de Tambo. No obstante, fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia señalaron que se trata del trámite habitual dado que al haber fallecidos en el siniestro es necesario que el juzgado autorice la celebración de los entierros de las víctimas. De hecho, confirmaban asímismo que ni tan siquiera habían recibido todavía el atestado de la Guardia Civil sobre este siniestro y que este todavía está en fase de elaboración. Más allá de las manifestaciones que realizaron los dos supervivientes tras ser rescatados, los agentes que investigan el accidente deberán tomar declaración formalmente a ambos, diligencia que la Comandancia está retrasando de forma lógica y humana hasta que se celebrasen las exequias fúnebres por los fallecidos. Y es que hay que recordar que los dos supervivientes (Carlos Carballa y Adrián Ligero) son, a su vez, hijos de dos de los fallecidos (Florentino Carballa y Jesús Ligero).