La sexta ronda de negociaciones para la renovación del protocolo del acuerdo pesquero euro-marroquí comienza a partir de mañana en Rabat en un clima de relativo optimismo que hace pensar en que, esta vez, podría alcanzarse un acuerdo.

En esta ronda, que estaba prevista anteriormente en Bruselas antes de sustituirla por la capital marroquí y que coincide con el último día de la visita oficial que efectúa el rey Juan Carlos I a Marruecos, se prevé que se progrese en todos los asuntos pendientes.

Aunque los técnicos negociadores son los del departamento de Pesca, la decisión final descansa en gran medida en el ministerio de Asuntos Exteriores, ya que los asuntos que llevan bloqueando las discusiones durante meses no son los pesqueros, sino los políticos. Sin embargo, fuentes europeas expresaron su optimismo ante el avance de las negociaciones, gracias al acercamiento de posturas sobre la contrapartida financiera, que ha sido uno de los capítulos que ha atascado el proceso negociador. El punto de partida europeo es el de ofrecer 25 millones de euros anuales, cifra revisable solo en el caso de que Rabat permita un mayor esfuerzo de pesca.