Cuando el bosque de Navia duele

Vestidas de rojo y tomadas de las manos, unas 200 personas recorrieron 285 metros del corazón de la Carballeira de Casaliños, en el barrio de A Barroca (San Paio de Navia) para representar la “herida abierta” que guarda el corazón del bosque y alertar a la población de su posible desaparición. En el marco de la acción colectiva titulada “Ferida”, decenas de personas se adentraron para rodear una parte del perímetro de la Carballeira de Casaliños con el objetivo de concienciar a los vigueses sobre el peligro que corre este espacio natural de la ciudad, puesto que en la aprobación inicial del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) estaba contemplado como espacio verde hasta que en la aprobación provisional pasó a ser considerado como “equipamiento”.

Promovida por el colectivo COVA y la plataforma “Vigo verde-Salvemos A Barroca), en la acción estuvieron presentes las artistas plásticas Lucía Romaní, Antía Sánchez y Neru Herreros, y desde la organización indicaron que el hecho de haber animado a las personas asistentes a vestirse de con prendas de color rojo para la ocasión se debió a que “con esta cor a natureza alértanos dos perigos”, añadiendo que la intervención artística colectiva pretendía reproducir “unha ferida aberta no bosque que representa o sentir xerado pola perda deste lugar sagrado”, apuntaron.

Tras citarse a las 12.00 horas en el entorno de la Alameda de Navia, la multitud partió hacia la Carballeira de Casaliños para iniciar la acción que procuró en todo momento alterar lo menos posible el entorno del espacio natural y el ecosistema. Desde las entidades organizadoras se criticó la modificación de la categorización del espacio en el PXOM a finales de diciembre, “cando xa non se contemplaban alegacións” e hicieron referencia a que la proyección del Vigo Arena, precisamente en estos terrenos, sería incompatible con la “protección dos humedais de Fontes Pertegueiras, debido á gran dimensión das obras planificadas para este proxecto”.

Es por esto que los vecinos y vecinas de Navia decidieron dar ayer un paso al frente por el bosque que les duele y llamar la atención del resto de vigueses sobre la posible desaparición de una arboleda que ocupa una superficie de 40.000 metros cuadrados.