Comunidades de vecinos reducen más de un 10% la factura energética este invierno

La inversión para mejorar la eficiencia en los edificios y la limitación del tiempo de la calefacción, claves

El ahorro conseguido permite contener la morosidad

Una vecina de Vigo revisa su factura eléctrica.

Una vecina de Vigo revisa su factura eléctrica. / Alba Villar

Comunidades de vecinos de Vigo están consiguiendo, progresivamente, contener la factura de la luz tras más de un año completamente disparada. Concretamente, este invierno, muchas de ellas han reducido más de un 10% el coste energético que tanto estaba ahogando las cuotas comunitarias y las de los propios residentes. Y lo han conseguido tras aplicar una serie de medidas propuestas por los administradores de fincas que gestionan las comunidades.

La medida estrella y que ha conseguido un mayor efecto es la limitación del uso de la calefacción. Concretamente, se planteó a los propietarios reducir los horarios de los dispositivos de calor, especialmente en aquellos edificios con sistemas comunitarios. Para conservar la buena temperatura en el interior de las viviendas, es clave otra de las propuestas: reducir la ventilación de los pisos a diez o quince minutos al día.

Estas medidas fueron propuestas a nivel gallego por el Colegio de Administradores de Fincas de Galicia (Coafga), y en Vigo están teniendo muy buenos resultados, porque son muchas las comunidades de vecinos que las están aplicando. Destacan también las inversiones que se han realizado en los edificios de viviendas para reducir la demanda y la dependencia energética, iniciando procesos con el desarrollo de una estrategia clara de ahorro y eficiencia. Los administradores tienen claro que es el momento de apostar por la implantación de energías renovables y de los procesos de rehabilitación energética, lo que repercute también en menos gasto en la factura.

Pero los ajustes energéticos realizados por las comunidades de vecinos para reducir la factura eléctrica no se han quedado ahí. Algo que muchos inquilinos o propietarios pasaban por alto es revisar la potencia contratada. Ahora, sin embargo, cada vez son más los que solicitan una supervisión de la potencia sobre los suministros de la comunidad y gestionan los ajustes correspondientes. Hay que tener en cuenta que normalmente se tiene contratada una potencia que el piso o la comunidad no necesita, normalmente al alza, por lo que están solicitando a las empresas eléctricas una reducción de la misma.

Además, el desarrollo, identificación y vigilancia de todos los indicadores energéticos fundamentales para la gestión de los edificios está permitiendo identificar situaciones fuera de la media y orientar los esfuerzos hacia lo realmente necesario.

Estas medidas, entre otras pero ya de menor calado, han permitido reducir la factura eléctrica más de un 10% en muchas comunidades de vecinos de Vigo y, con ello, se ha conseguido contener la morosidad, que estaba completamente desbocada desde la pandemia y la guerra de Ucrania por la inflación y el encarecimiento de prácticamente todo lo necesario para el día a día. Muchos propietarios apostaron por recortar gastos y, entre otras cosas, dejaron de pagar la factura eléctrica o las cuotas de la comunidad. Con el ahorro logrado ahora, los que deben dinero a la comunidad son cada vez menos.

Suscríbete para seguir leyendo