MUERE JOSÉ SILVEIRA CAÑIZARES

El naviero que se va con los sueños cumplidos

De fundar una empresa de remolcadores extendida por todo el país y Portugal a hacerse con la primera naviera de España: la trayectoria empresarial de José Silveira lleva la marca del éxito

José Silveira Cañizares, en la sede de Remolcanosa en Vigo

José Silveira Cañizares, en la sede de Remolcanosa en Vigo / Alba Villar

La comunidad portuaria de Vigo y de Galicia ha perdido a uno de sus más importantes referentes. Un hombre que ha hecho historia en su ciudad de adopción, Vigo, y ha extendido desde aquí su influencia en el sector marítimo español.

José Baltasar Silveira Cañizares nació en 1938 en Helechosa de los Montes. Hijo de un funcionario gallego afincado en esta pequeña localidad de Extremadura, precisamente por el traslado de su padre, Silveira se trasladó muy joven a A Coruña. La decisión que tomó en la ciudad herculina marcaría la vida de ‘Pepe’, como así se referían siempre en Vigo a la hora de referirse a él (entre portuarios, con el hipocorístico bastaba para que todos supieran que se hablaba de Silveira, como si no hubiera otro Pepe más).

En A Coruña estudió la especialidad de Máquinas en la Escuela Oficial de Náutica. Y una vez terminó sus estudios arrancaría su carrera profesional allí donde años más tarde, pero rápidamente, comenzaría a fraguar junto a su mujer, María del Rosario Martín (Chari), uno de los grupos empresariales familiariares más pujantes de España.

Tras una intensa etapa como jefe de máquinas de los primeros arrastreros congeladores de Pescanova, un Silveira con 36 años recién cumplidos funda la compañía de remolcadores Remolcanosa. Para él y sus tres hijos -Charuca, Josechu y Julio- el año 1974 quedaría marcado para siempre porque desde ese momento su vida empresarial estará presidida por los éxitos.

Del despliegue de Remolcanosa, con cerca de una treintena de buques prestando servicio en los principales puertos de España y Portugal, a la compra de un hospital con 700 camas aunque acorralado financieramente: el Policlínico Vigo S.A. Cuando nadie en Vigo se esperaba que el salvavidas para Povisa llegase a tiempo y desde la propia ciudad, Silveira cerró el acuerdo con el primer propietario y amigo suyo, el doctor Antonio Pintado Saborido, convirtiéndose no solo en su socio sino en el principal accionista. Recién vendido al grupo Ribera Salud, durante el tiempo bajo la tutela de los Silveira, Povisa fue referente en el sector sanitario y por capacidad, el mayor hospital privado de España.

Si sorprendió el desembarco del grupo de Silveira, rebautizado como Grupo Nosa Terra XXI, en el sector sanitario, no lo fue menos que de una flota de remolcadores pasara a hacerse con una de mercantes, y no unos cualquiera. La compra de la compañía estatal Naviera Elcano en 1997 ha sido una de las operaciones de mayor calado realizadas en el sector marítimo del país desde finales del siglo pasado al actual.

Sin contar el entramado alrededor de sus filiales en Argentina y Brasil, entre los buques de esta armadora hay petroleros, gaseros y bulkcarriers. Solo como referencia, todos los barcos de Elcano representaban, en el momento de la compra por parte de Nosa Terra, el 25% del tonelaje total de la flota española.

Con este poderoso holding se entiende que entre su círculo de amistades se soliese decir que para 'Pepe', Remolcanosa era su principal orgullo pero que lo de Elcano fue su verdadero sueño. Y se va con este cumplido y otro igual de importante: dejar el legado al mando de sus hijos.

Suscríbete para seguir leyendo