El Juzgado de lo Mercantil nº 3 de Pontevedra, con sede en Vigo, ha declarado el concurso de acreedores de la sociedad Colegio Breogán S.L., la encargada de gestionar el colegio concertado que ha cerrado sus puertas y su actividad este curso a consecuencia de la falta de alumnos por la caída de la natalidad.
La sociedad, representada por el letrado y administrador Aquilino Pérez Puga, solicitó el procedimiento concursal para poder hacer frente al pago a una deuda que asciende a los 350.000 euros. Los únicos acreedores con lo que cuenta la sociedad son los hasta ahora profesores del centro educativo –que tenía un concierto con la Xunta ya extinguido– y dos socios más de la firma.
Al tratarse de un concurso donde no hay masa activa, el FOGASA –Fondo de Garantía Salarial– deberá hacerse cargo de dichas deudas para saldar a los acreedores. Dichos trabajadores se encontraban en un ERE por la situación límite de la empresa. Y es que la caída de la natalidad en la ciudad fue recortando unidades y líneas educativas en los últimos cursos hasta sobrevivir solo una en Infantil y dos en Educación Primaria en su último año.