O Marisquiño clausura su gran edición en la playa de Samil “con más gente que nunca”

La organización, que fía su futuro al arenal vigués, celebra el exitoso traslado de un festival con más de 150.000 asistentes

Hostelería y transporte resaltan los buenos registros y la enorme presencia internacional

Así fue la última jornada de O Marisquiño.

Foto: José Lores / Vídeo: cedido

O Marisquiño cerró ayer su XXIII edición con un inmenso buen sabor de boca, viendo cómo el sol se ponía sobre el horizonte de Samil, ante las Cíes, entre finales de BMX o Skate, saltos espectaculares y acrobacias inverosímiles. La organización se declara contenta con el traspaso del festival al arenal más grande de Vigo. “Estamos satisfechos con el nuevo emplazamiento al que se ha trasladado el epicentro del evento”, afirmaban ayer miembros de la misma. Como ya recogió FARO y volvieron a corroborar los organizadores, el festival ha llegado para quedarse en un espacio con mejores condiciones para albergar las infraestructuras que soportan las competiciones y al público que las disfruta.

Este ha sido el año en el que más torneos se han celebrado a escasos metros de la playa –tan solo las batallas de gallos y el Basket 3x3 se realizaron en Porta do Sol y el Náutico–, y pese al cambio de escenario, algo siempre complejo a nivel logístico, las cifras que se esperan son positivas. Se prevé volver a superar los 150.000 asistentes, barrera ya rota antes pero cuyo récord podría rebasarse este verano. Durante estos últimos cuatro días, en los que más de 600 participantes de numerosos países lo han dado todo, la repercusión mediática también se ha maximizado, a través de múltiples retransmisiones nacionales e internacionales.

La XXIII edición, que se compitió casi en su totalidad en Samil, “tuvo más gente que nunca”, apuntó ayer el alcalde de Vigo, Abel Caballero, en declaraciones a este periódico. “La calidad deportiva de los competidores fue muy alta y la nueva ubicación ha obtenido una muy buena valoración”, añadió.

Desde el sector servicios, ofrecen una visión similar. Para Iván Sánchez, presidente de Ahosvi, la asociación hotelera de la urbe olívica, es un “privilegio” poder contar con este tipo de pruebas “de campeonato mundial que nos muestran al exterior y atraen a espectadores muy diversos”. “Este año han cambiado los flujos de visitantes, pero cierto es que es una vuelta al origen. El enclave principal, en plena ría y con las Cíes de fondo es de película”, destaca este portavoz hotelero.

O Marisquiño ha provocado de nuevo días de “completo”, asevera, habiendo abarrotado los hoteles y copado todas las habitaciones para estas fechas. “Es muy destacable que este completo tiene una entidad especial, ya que el perfil del evento, de los participantes y de los asistentes es distinto al de otros eventos tipo feria o congresos, dando un soplo de aire fresco, atrevido y disruptivo. Aportan un nuevo prisma a la ciudad, que siempre ha tenido esas asociación con la cultura urbana”, agrega.

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R. V.

Así también se pronuncia Beatriz Carballido, gerente de la Federación de Hostelería de Pontevedra, aunque advierte del efecto rebote de mitad de mes. “La ocupación ha sido del 100%. La repercusión en los hoteles es bastante importante, pero a partir de este lunes habrá una pequeña bajada que se empezará a notar ya que es el día de corte”, asegura, pues mucha gente deja de estar de vacaciones y comienza a pensar en la incorporación. En cuanto a la afluencia, “habrá hoteles con disponibilidad, pero estaremos moviéndonos entre un 80% y 85% entre el lunes martes y miércoles”. “Los datos serán buenos, pero no tanto como los de la primera quincena”, ,matiza.

Desde el transporte privado, el balance es “extraordinario”, más si cabe teniendo en cuenta la huelga que afecta a los autobuses de Vitrasa en la ciudad. “No hemos parado”, reconocen fuentes del sector, que pese al refuerzo de los taxis certifican que “por momentos no se dio a basto para transportar a los visitantes de Samil al centro”.

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