El coronavirus apretó, pero no ahogó, a las salas de la ciudad en el segundo año de la pandemia. Los museos y centros expositivos sumaron en 2021 un total de 120.645 visitas y demuestra que la vida cultural de la ciudad continúa su recuperación.

Las cifras siguieron condicionadas por las restricciones de movilidad e interacción social, aunque en menor medida que en el año anterior. En esta ocasión, el cierre solamente fue total entre el 27 de enero y el 17 de febrero, en el peor momento de la tercera ola, dejando en poco más de un millar los usuarios en ese mes.

El avance de la vacunación y la reactivación de la agenda cultural impulsaron las cifras desde el verano, manteniéndose por encima de los 5.000 usuarios mensuales. Esta afluencia se duplicaría en agosto gracias a la Noite Branca que permitió el acceso gratuito a todos ellos de 2.624 personas.

La red de museos coge aire en 2021

Este largo camino a la “nueva normalidad” tiene su reflejo en un dato demoledor: el conjunto de la red logró duplicar sus cifras en cada trimestre desde las 7.898 personas de comienzos de año hasta las 69.520 que lo despidieron. Antes de la temporada estival y con el fin de las medidas más severas, como los cierres perimetrales, estas cifras crecieron a las 14.312 visitas, multiplicándose por dos en el tercer timestre hasta los 28.915 usuarios.

Si una sala puede presumir de haber vuelto a la vieja normalidad, esa es la Pinacoteca Francisco Fernández del Riego. Con la muestra dedicada al intelectual y escritor fallecido en 2010, la sala de Abeleira Menéndez alcanzó los 2.657 visitantes, cifra cercana a la cosechada en 2018.

También en el centro de la ciudad el Museo de Arte Contemporáneo remonta más de un 30% respecto al año anterior y se afianza como el segundo más visitado en toda la red. El Marco vivió una “vuelta al cole” particular con un notable crecimiento desde el mes de septiembre para alcanzar los 31.094 visitantes.

El “efecto Navidad”

En este crecimiento respecto al 2020 influyen diversos factores, aunque el efecto de las luces de Navidad también deja huella en la red de museos. El Belén de Casa das Artes abierto entre el 27 de noviembre y el 6 de enero catapultó las cifras del edificio ubicado junto al árbol de Policarpo Sanz. Entre el mes de noviembre (6.293) y diciembre (36.944) acaparó más del 40% de las visitas culturales de la ciudad en todo el año, catapultando a su sede como el centro más visitado en la ciudad por cuarto año consecutivo.

También el Liste aumentó su afluencia en diciembre gracias a la exposición de 23 belenes llegados de todo el mundo, sumando 12.708 visitas en todo el curso.

El archivo Pacheco remontó en la recta final del año hasta el punto de ser el que registra una menor caída respecto al año anterior con un 5% menos. Aún así, sus 140.000 fotografías de memoria fotográfica de la ciudad continúan lejos de sus mejores registros y con la digitalización completa, 30 años después de su adquisición, como principal cuenta pendiente.

Las cuentas pendientes

Pese a que la recuperación sigue la tendencia de la registrada en otros indicadores como los pasajeros del aeropuerto de Peinador, las red se mantiene a mitad de camino hasta la cifra récord de 265.624 visitantes registrados en 2019.

Uno de los centros que posibiliataría este renacer de una forma más clara sería la Casa Galega da Cultura, quien perdió a la mitad de sus usuarios del 2020 y acumula una caída de casi el 90% después de que en 2019 batiera todos sus registros previos con 73.545 visitas.

El Verbum no recoge el efecto arrastre de Samil –refugio de centenares de vigueses durante todo el año por su seguridad al aire libre– aunque solamente pierde 3.000 visitas respecto al 2019.

El Pazo y Museo Quiñones de León también recupera las cifras registradas hace una década hasta los 12.708 visitantes. El aluvión de visitas entre julio y noviembre le permite crecer un 51,4% respecto al período anterior.