El horario ampliado de apertura de los locales hasta las nueve de la noche se estrenó este viernes, en el inicio de un puente festivo que además coincidió con buen tiempo. La gran mayoría de establecimientos de hostelería y de ciudadanos acataron las normas, pero siempre hay excepciones. De nuevo esta tarde de sábado se han repetido las aglomeraciones vividas ayer en la calle Teófilo Llorente. La Policía Local ha confirmado a FARO que han recibido llamadas para quejarse de los jóvenes que se juntan ante un local de esa zona. “El problema es que vamos allí, se desaloja y al poco tiempo vuelven”, explican. En estos momentos, hay en el lugar montado un dispositivo con una decena de agentes con el objetivo de vigilar de forma permanente que no se produzcan reuniones de más de seis personas en plena pandemia de COVID-19.
La situación preocupa. Juanjo Figueroa, presidente de Casco Vello Vigo Hostelería e Comercio, afirma que son “dos” los locales que lo están “haciendo mal y no cumplen” y que eso afecta injustamente “a todos”. El resto de negocios, agrega, trabajan según las normas de forma “ejemplar”. “En plaza de la Constitución, por ejemplo, lo están haciendo genial”. Pide que se “multe” a los pocos que incumplen. “Y si siguen sin acatar las normas que los cierren”, indica. La asociación vecinal del Casco Vello se expresa en términos similares: “Por la mala praxis de algún local se habla de todos”.
15 propuestas de sanción durante el Día del Padre
La Policía Local de Vigo tramitó durante el Día del Padre 15 propuestas de sanción contra locales por incumplimientos de la normativa COVID en toda la ciudad. Además, se procedió al precinto de un establecimiento más, ubicado en la céntrica calle Ecuador, por excederse en el aforo por segundo día consecutivo. En cuanto a particulares, fueron denunciados un total de 39: la mayoría por exceder el toque de queda (20) y por no usar mascarilla (11), pero también por estar con no convivientes (6) o por fumar en la calle (2).
En el parte de los agentes municipales se destacan dos intervenciones el viernes en el Casco Vello. Una en calle Chao, donde a instancias de la Policía Nacional se comprobó, informan fuentes municipales, “que algunos locales superaban el aforo”. Fue denunciado uno de ellos por no acatar las medidas de la pandemia, así como un particular “por falta de respeto y consideración”. En Teófilo Llorente, agregan, se hizo un control de licencias de terrazas y establecimientos: todos cumplían menos uno. En ese punto se observó, como desvelan unas fotografías publicadas en la web de FARO, “mucha gente en la calle” y “grupos de jóvenes sentados en las inmediaciones”, algunos de ellos bebiendo. El viernes los agentes tuvieron que acudir también a un local a una pelea, que se disolvió a la llegada de la patrulla. Allí fueron denunciados dos chicos por no usar la mascarilla.
Denuncian la agresión a una mujer que hacía fotos de las aglomeraciones
La asociación vecinal y la de hosteleros del Casco Vello tenían constancia hoy de la agresión de la que supuestamente fue víctima una vecina del barrio histórico a última hora de la tarde del viernes en Teófilo Llorente, cuando sacaba fotos tras observar las aglomeraciones de jóvenes que había ante uno de los locales a los que se atribuyen los incumplimientos en el barrio histórico. La mujer estaba paseando su perro. “Llamó la atención a personas que estaban en la calle en actitud poco respetuosa y la rodearon a ella y a otro vecino; le dieron una patada por la espalda y después recibió más golpes”, explican desde el colectivo vecinal, que muestra su apoyo a la víctima, que ya habría presentado denuncia policial y tiene parte sanitario de lesiones. “Esto nos hace recordar tiempos que no nos gustaría revivir”, lamentan.
