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El sacerdote que permite confesar bajo cita previa

El sacerdote José Carlos López, ayer con la aplicación durante una confesión en San José Obrero. Ricardo Grobas

Confesarse en tiempos de pandemia y autoconfinamiento suele ser más difícil. Los sacerdotes han modificado sus horarios de disponibilidad y los fieles en muchos casos no saben a dónde acudir para expiar sus pecados. Lo que muchos no saben es que existe una aplicación móvil que se puede descargar de forma gratuita que se llama Confesor Go y que a través de geolocalizador permite encontrar al sacerdote más cercano, sus horarios y lugares de confesión e incluso su teléfono para poder llamarlo y poder solicitar cita previa. En Vigo de momento hay únicamente un cura anotado en esta app para que lo localicen a través de ella. Se trata de José Carlos López García, que atiende a sus fieles en San José Obrero, en Fátima, en la iglesia Juan Pablo II y en la capilla de San Clemente. En la aplicación tiene puesto sus horarios y su número de teléfono, y desde que se inscribió en ella, se ponen en contacto con él personas que no sabían dónde acudir a confesarse, especialmente jóvenes. “Me pueden llamar y si quieren una cita, se la doy”, explica José Carlos López. “En general los que me contactan a través de Internet son personas más jóvenes. Los mayores siguen siendo reacios a esas cosas”, explica.

Caída en picado de las peticiones

Ahora, con la situación sanitaria actual, los sacerdotes de una edad muy avanzada han decidido en muchos casos dejar de confesar u ofrecer misa por seguridad. Por eso esta app es tan útil para encontrar un confesor. José Carlos López García tiene 61 años y sigue con fuerzas para seguir ejerciendo. Admite no obstante que desde el inicio de la pandemia las peticiones de confesiones han caído en picado por el temor de la gente a salir de la calle o a entrar en espacios cerrados. No obstante, defiende que el acto confesor en sí se realiza con la máxima seguridad: ya no tiene lugar en el confesionario, sino especialmente en un banco de la iglesia o en una sala grande, con la distancia de seguridad necesaria de al menos metro y medio de distancia y siempre con mascarilla tanto por parte del cura como del penitente. “Venir a la iglesia ahora mismo es muy seguro, los aforos se han reducido considerablemente para evitar aglomeraciones y hay distancia suficiente en las misas y en cualquier acto religioso”, defiende este sacerdote murciano que fue ordenado en Roma por el mismísimo Juan Pablo II y que lleva más de treinta años ejerciendo en Galicia.

José Carlos incide en una cosa: la app Confesor Go no es para confesar online. Precisamente porque la doctrina católica “lo prohíbe expresamente, ya que es un acto que solo se puede realizar de forma presencial”. Lo que sí permite esta aplicación, por ejemplo, es saber cuándo un cura está activo y en qué iglesia, para acudir a hablar con él. “Yo me activo y de esa forma la gente sabe cuándo puede venir”, explica el sacerdote de Vigo, que de momento es el único que se ha sumado a esta iniciativa.

Lo cierto es que desde el inicio de la pandemia las peticiones para confesarse han caído en picado por el miedo a contagiarse, pero José Carlos insiste: “En las iglesias no hay contagios, y confesarse es el mejor quitamiedos contra el COVID. Yo rezo todos los días para que acabe esta pandemia tan terrible”.

Funcionamiento

Confesor GO es una aplicación orientada a facilitar la administración del conocido como sacramento de la reconciliación. Muestra la información de los lugares y los horarios en los que los confesores anuncian que estarán disponibles para administrar el sacramento. Pero su servicio más característico es el de mostrar qué sacerdotes están disponibles en tiempo real, y dónde se encuentran. Así, ofrece la localización exacta de sacerdotes que se encuentran disponibles para escuchar confesiones. Para facilitarte la localización de un cura, se puede consultar previamente los horarios habituales tanto en capitales de provincia como en otras localidades. Llegado el momento, ya se verifica si, efectivamente, el confesor está en el lugar y en el horario anunciados. Si aparece en el mapa, es que el sacerdote ya está esperando.

Si el GPS del teléfono del usuario está activado, además, se podrá hacer uso de otras funciones que ofrece Confesor GO como calcular la distancia hasta el sacerdote, o mostrar la ruta más corta para llegar a esa ubicación. La aplicación por ejemplo también permite a los curas que estén anotados que especifiquen, además de sus teléfonos, los lugares en los que confiesan, también los idiomas en los que pueden hacerlo. “Esta aplicación tiene mucho futuro, porque la gente cada vez utiliza más el móvil. Quiero hacer un llamamiento a que todos aquellos que deseen confesarse y no lo hagan por miedo, que vengan a hacerlo. Es completamente seguro”, apunta José Carlos López.

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