El acusado de abusar sexualmente de dos hermanos de 4 y 5 años de edad en Vigo negó hoy los hechos en el juicio que comenzó en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo. “Eso no pasó nunca”, dijo en relación a las acusaciones, señalando que cuando se quedaba al cuidado de los pequeños porque la madre necesitaba ayuda los niños veían los “dibujos” en la televisión o jugaban con la pelota en el patio.

La vista se celebró pese a que la sala no logró localizar a la madre y a los menores, que se sospecha que podrían estar en Sevilla. Dada la incomparecencia, se leyó la declaración prestada por la mujer en el juzgado de Instrucción cuando denunció los hechos. 

El acusado y la madre de los niños se conocieron en 2010, entablando una relación de amistad, de forma que cuando ella necesitaba ayuda con sus hijos, porque su pareja estaba trabajando, recurría a él para que fuese a su casa y cuidase a los niños. 

La Fiscalía considera que en fechas indeterminadas, en torno a finales de 2017 y principios de 2018, “aprovechando la total confianza de la familia de los niños”, el acusado supuestamente aprovechaba las veces que estaba a solas con ellos en la casa familiar y empezó a desnudarse, “diciendo que tenían que jugar al juego del piru o del pito”, que era un secreto, sobrepasándose al menos con el mayor de los niños mientras el pequeño presenciaba los hechos. 

Los hechos fueron descubiertos por la madre de los niños cuando bañaba a ambos, en que tras sorprenderlos cuando trataban de ocultar lo que hacían, ellos le dijeron lo que había sucedido. Esa misma noche la mujer, tras contárselo a su marido, denunció los hechos.

La Fiscalía califica los hechos de delito continuado de agresión sexual y, además de la pena de 6 años de prisión, pide otros 6 de libertad vigilada y 10 de inhabilitación para profesión u oficio que conlleve contacto regular con menores. También solicita 10 años de alejamiento con respecto a las víctimas.