Tan sólo ha pasado un año, pero este inasumible virus sin fecha de caducidad, parece querer nublarnos la esperanza. ¡No lo logrará! Ante vosotros uno de los últimos grupos del Vigo universal, con 21 miembros amantes de los Viajes con Espíritu Aventurero, que en octubre de 2019 recorrían el enigmático Egipto en compañía de nuestro viajero de referencia, Manuel Fernández (Wuly). Nadie imaginaba que unos meses después, en marzo de 2020, ese espíritu del viaje habría de posponer sus ansias ante las oleadas coronavíricas.
Pereiro, con la cámara en ristre
Uno conoce a Román Pereiro casi desde antes de nacer. Ya de niño su Laboratorio de Análisis Clínicos en la Plaza de la Constitución y la tienda de antigüedades Arte de su suegro, hoy ambulatorio de la Segurida Social, eran parte de mi paisaje cotidiano en el barrio y seguro que de los primeros pinchazos indagatorios en mi cuerpo infantil tuvo alguna culpa. Ya de mayor, aparte de buena vecindad, mi trabajo periodístico me ha llevado a conocer su personalidad multifacética: médico en la pública, analista clínico en la privada, crítico y comisario de arte (preguntad por él a Leiro, Patiño, Menchu Lamas, Lamazares, Basallo, Huete, Correa Corredoira, Silverio Rivas y tropecientos más), promotor del movimiento Atlántica, director del Museo del Real Club Celta, coleccionista... y fotógrafo, A sus 87 tacos, la fotografía le ocupa ahora especialmente y este mismo viernes inaugura en la viguesa Casa da Cultura Galega su tercera exposición, tras las que montó en esta misma entidad y después en un espacio tan juvenil como El Halcón Milenario. Va a ser una mirada con la cámara a su propio pasado habitacional en el barrio viejo. Acabo diciendo que hay algo que distingue a este Hijo Adoptivo de Baiona a pesar de ser vigués: su buen humor, su espíritu tertuliano y esa memoria suya de Vigo (y de Galicia) de alto alcance. Nunca nos olvidaremos de su mujer, Malena Lepina, fallecida este año.
Germán Luaces, dos años ya
Glosa Xurxo Rodríguez en su blog Distopías 18 la figura del último isleño de las Cíes, ido hace dos años: Germán Luaces, persona generosa. Y lo hace con feeling, bebiendo de fuentes hemerográficas como el propio FARO DE VIGO, que en su día publicó un doliente artículo de Aránzazu Luna, amiga de Germán. Sus cenizas reposan en el cementerio de esas islas y se promueve que se recuerde con algún lugar que lleve su nombre. En ello insiste Xurxo Rodríguez, recordando quizás aquella Casa do Chuco en las Cíes. En ella moraba permanentemente desde los noventa, tiempo antes del Prestige, este último habitante de las islas que murió el 30 de noviembre a los 54 años cuando ya nadie lo esperaba, después de dar batalla al cáncer una década.
Hágase la luz, dijo Caballero
Hoy se encienden en Vigo las luces de Navidad. La incidencia a nivel psicológico de las luces navideñas es un fenómeno muy poco estudiado pero yo creo que cuando el alcalde Caballero y sus adláteres enciendan las luces esta ciudad será como un “chute” de endorfinas para unas fechas que se presentan como muy difíciles para muchas personas.