No es un adiós, tan solo un hasta luego. Dinoseto y su cría, Dinosetiño, se mudan temporalmente. Esta mañana, bajo la supervisión del alcalde, Abel Caballero, y el edil de Ángel Rivas, la emblemática escultura vegetal era trasladada desde su ubicación privilegiada en Porta do Sol hasta la Alameda de la Plaza de Compostela, donde estará durante aproximadamente año y medio.
Dinoseto llegó a la ciudad hace ya cinco años. Su primer domicilio fue en Rosalía de Castro para, finalmente, establecerse en el centro neurálgico de la ciudad. Ahora, las obras de peatonalización en Porta do Sol hacen necesario un nuevo cambio.
Desde que el particular seto apareció en las calles viguesas hacerse una foto con el se convirtió en ritual casi indispensable, elevándolo a la categoría de icono de la ciudad, al menos en redes sociales, un papel que está dispuesto a mantener desde la Alameda.
