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La crisis del coronavirus frena el segundo mejor arranque de año hotelero desde 2008

La Xunta tantea alojamientos en la ciudad para instalar a pacientes si fuera necesario

Hugo Barreiro

La crisis del coronavirus golpea con una fuerza especial al sector turístico, noqueado por un estado de alarma que se prolongará al menos hasta la segunda semana de abril. En Vigo la pandemia ha frenado en seco además el alza de viajeros y pernoctaciones que los hoteles llevaban disfrutando desde hace un lustro. Los últimos datos publicados por el INE, muestran que durante los dos primeros meses del año se alojaron en los hoteles, hostales, pensiones... de Vigo casi 47.600 viajeros que pagaron por 97.200 pernoctaciones. Los datos reflejan ligeras caídas del 1% y 9%, respectivamente, si se comparan con el mismo lapso de 2019; pero siguen estando muy por encima de los resultados de años pasados. De hecho, marcan el segundo mejor inicio de ejercicio desde 2008.

El flujo de turistas se resintió ligeramente en enero y volvió a hacerlo de nuevo en febrero. A diferencia de lo que ocurrió durante el primer mes del año, sin embargo -influido por la campaña de Navidad-, el mes pasado cayó con fuerza la actividad del turismo nacional. Si en febrero de 2019 los hoteles anotaron 40.700 pernoctaciones de españoles, el mes pasado fueron ya 32.900, lo que supone un descenso del 19%. En el gremio trabajan cerca de 500 personas.

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Con la entrada en juego del Covid-19, la caída de actividad en los hoteles será muy superior y dejará probablemente un marzo histórico por su reducido volumen de actividad hotelera. Después de que el Gobierno decretase el estado de alarma, el lunes de la semana pasada las asociaciones de hoteles de Vigo avanzaban que en cuestión de días cerraría el 80% de todos los negocios. Poco después, el Ejecutivo obligaba a la "suspensión de apertura al público de establecimientos de alojamiento turístico". Como única excepción contemplaba aquellos negocios con clientes hospedados de manera estable y bajo circunstancias especiales.

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La Xunta ha ampliado sin embargo los escenarios y detalla que podrán seguir abiertos "aquellos establecimientos turísticos que sean necesarios para el alojamiento de trabajadores de sectores estratégicos y de primera necesidad", así como los que son "esenciales para asegurar el abastecimiento". También detalla que se "facilitará la apertura de establecimientos" para colectivos vulnerables, como gente sin hogar o víctimas de violencia de género. Los locales, detalla, no podrán superar en cualquier caso un tercio de su ocupación.

La administración autonómica tantea también hoteles en la ciudad para destinarlos a alojamiento de pacientes en caso de ser necesario. Sobre la mesa habría perfiladas ya dos opciones, dos establecimientos céntricos, situados en el casco urbano; aunque desde el sector explican que si fuera necesario un mayor número de plazas estarían disponibles más hoteles.

De momento, una de las consecuencias del Covid-19 es que la oferta hotelera de Vigo ha caído a mínimos. En Booking, de hecho, se publicitan prácticamente en exclusiva apartamentos turísticos. Otras webs centradas en esa actividad, como Airbnb, sigue informando de alojamientos disponibles.

El confinamiento no es la única medida activada por el Gobierno para frenar el Covid-19. Otra fue la reducción en un 50% de los trenes de Media y Larga Distancia. Desde CGT se demanda sin embargo "una reducción drástica" de los servicios "atendiendo a la ocupación mínima" que se registra en los trenes. La conexión Vialia con Madrid ya se ha reducido a solo una frecuencia diaria. El sindicato demanda también que se abastezca al personal de equipos para evitar contagios.

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