El jefe del Departamento de Inglés de la Escuela Oficial de Idiomas de Vigo, Luciano Fernández, no se aventura a asegurar si el requisito exigido por el Ejecutivo de Boris Johnson provocará un aumento en la demanda para aprender este idioma. De todos modos, cree que el nivel solicitado, un B1, es "intermedio-bajo" y está al alcance de estudiantes que rematan sus estudios de secundaria. "Puede que ayude a algunas personas que tenían pensado emigrar a tomárselo más en serio, pero creo que no va a afectar en gran medida", apunta.

La dirección del centro sopesa valorar las consecuencias de la salida del Reino Unido de la Unión Europea para elaborar la oferta del próximo curso en esta lengua, que, actualmente, domina en las aulas de Vigo: reúne a 2.941 alumnos -un 56% del total del estudiantado-.