Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

"El mando aporta libertad y autonomía"

Dos viguesas con discapacidad visual relatan a FARO cómo ha mejorado su día a día con el sistema Bluetooth del Concello que activa la señal acústica de los semáforos

Lorena Fernández y Paula Varela caminando por Urzáiz. // Alba Villar

Cuando te falta la visión, una señal acústica es sinónimo de independencia. A la salida de la sede de la ONCE, en la calle Gran Vía, las personas con ceguera se encuentran inmersas en una selva de asfalto por la que transcurren cientos de personas a diario. Los obstáculos son cada vez más numerosos y el ruido de las obras que se llevan a cabo en esa zona camufla el pitido de los semáforos. La ciudad está viva y hay que adaptarse. "Las técnicas de rehabilitación en los programas de orientación y movilidad enseñamos siempre sin el mando porque hay que aprender a cruzar y controlar el tráfico por oído, para que se adapten a cualquier medio", comenta la técnica de rehabilitación y movilidad de la ONCE en Vigo, Julia.

VÍDEO | El mando que ayuda a cruzar a los invidentes de Vigo

VÍDEO | El mando que ayuda a cruzar a los invidentes de Vigo

Lorena Fernández, subdirectora de la ONCE en Vigo, nació con ceguera. "Nunca me tuve que adaptar a nada porque siempre fui así. Recibí la ayuda de la organización desde el principio; yo estudié en un colegio público ordinario y venía bastante a menudo un profesor para ver las necesidades que tenía en el aula", detalla Lorena. La subdirectora detesta la condescendencia con la que mucha gente le habla porque las personas con ceguera no son "inútiles". "A mí no me da ninguna pena ser ciega", asegura.

La calidad de vida de cien usuarios de la ONCE mejoró cuando el mando de activación acústica cayó en sus manos. Este pequeño dispositivo a control remoto es facilitado por el Concello a los afiliados de la organización y permite activar la señal acústica de los semáforos cuando una persona invidente se aproxima. La periferia es la zona más hostil para las personas con discapacidad visual, tal y como se informa desde la asociación: "En las afueras se suelen ir implantando sistemas sonoros a medida que los usuarios lo solicitan en el ayuntamiento. Esto ocurre con los semáforos antiguos porque los nuevos ya tienen que tenerlo implantado desde el principio".

"El mando me da mayor independencia porque no dependo de otras personas para cruzar la calle. Hace un año y medio que lo uso y sí noto la diferencia porque antes no tenía autonomía", apunta Lorena Fernández.

La viguesa Paula Varela, afiliada a la ONCE, adquirió la libertad hace unos meses cuando comenzó a utilizar el sistema Bluetooth de activación de la señal acústica. "Facilita mucho la movilidad en la ciudad, aporta libertad y autonomía", asegura. Su adaptación a la falta de visión ha sido progresiva. Cuando era pequeña le detectaron un glaucoma y, en la actualidad, tan solo conserva el 10% de la capacidad visual. "A partir de los 34 años mi visión dejó de ser funcional y fue cuando solicité mi afiliación por ceguera", aclara Paula.

Cada vez que Paula y Lorena ponen un pie fuera de casa, su oído se activa. El control remoto activa todos los semáforos de la zona en la que ellas se encuentren por lo que deben prestar mucha atención para distinguir si es el suyo el que se ha puesto en verde. "Los cruces más peligrosos son los que se abren para los peatones, pero se mantienen en ámbar para los vehículos", apunta Julia.

Más accesibilidad y seguridad

Más accesibilidad y seguridad"Las ayudas porque permiten libertad", afirma con orgullo Paula.

El pitido del semáforo activable permite a las personas con discapacidad visual una mayor seguridad a la hora de moverse por la ciudad. "Hay semáforos que si ya están en verde cuando te aproximas, no pitan y esperan al próximo ciclo, porque pueden quedar pocos segundos para cruzar y es peligroso para nosotros", apuntó Lorena. Además, con estos dispositivos, los semáforos también suenan por las noches permitiendo que personas, como Lorena y Paula, puedan tener más autonomía y seguridad al ponerse el sol.

Asimismo, el mando permite la movilidad de los usuarios en otras ciudades que compartan el mismo tipo de sistema acústico. "Barcelona funciona del mismo modo que Vigo, por lo que si Lorena o Paula viajan a Barcelona podrán utilizar su mando con total normalidad", aclara Julia.

Las viguesas recorren la ciudad sorteando obstáculos, escuchando las señales acústicas y guiándose por el pavimento podotáctil de los pasos de cebra que les indica que ahí hay que frenar y esperar. "La sociedad, asegura Lorena Fernández.

Compartir el artículo

stats