La sede de la Asociación de Vecinos del Casco Vello acogió el lunes a última hora de la tarde una reunión con propietarios, vecinos y comerciantes del entorno de Porta do Sol, en la que un abogado les informó sobre los pormenores del proyecto de peatonalización. Al encuentro asistieron unas sesenta personas y, según pudo saber FARO por boca de varios de los asistentes, la mayoría mostraron una "gran preocupación".
Los propietarios de las edificaciones, especialmente de la calle Elduayen, aseguran que las construcciones son muy antiguas. "Va a haber mucho movimiento de tierras con las obras. Y muchas de las edificaciones no tienen ni cimentación, son viviendas superficiales. ¿Y si se cae la casa? ¿Hay un plan contra las grietas", se pregunta el dueño de un edificio de Elduayen.
Otra de las incertidumbres que plantean tiene relación con la accesibilidad. "Ahí vive mucha gente mayor y personas con movilidad reducida y los coches van a tener que dejarlas a cien metros de su casa. ¿Y las ambulancias? El plan de tráfico no está claro. El túnel ocupará prácticamente toda la calle Elduayen. No sabemos cómo vamos a poder acceder ni a pie ni en coche", comentaba un preocupado residente.
La reunión fue convocada "porque el Concello no informó de nada" a los vecinos, denuncian. Los asistentes acordaron solicitar una cita con Javier Pardo para trasladarle estas inquietudes.
