Los concejales del Gobierno vigués y de la corporación municipal guardaron ayer un minuto de silencio en Praza do Rei en memoria de las casi 200 personas fallecidas en los atentados del 11 de marzo en Madrid hace quince años y también de todas las víctimas del terrorismo. Durante el acto, el alcalde, Abel Caballero, leyó un manifiesto. "Decimos no a cualquier tipo de violencia terrorista", subrayó.