Una "reestructuración" de las unidades del Ministerio de Defensa a nivel nacional dejará a Vigo sin una subdelegación de la que se benefician en torno a 4.000 jubilados o funcionarios del área. La oficina local del Isfas (Instituto Social de las Fuerzas Armadas; el equivalente para los funcionarios públicos y civiles como Muface), encargada de gestionar la solicitud de recetas médicas, incapacidades, bajas o prestaciones familiares a guardias civiles y militares cerrará antes de final de año y todos estos trámites pasarán centralizarse en Pontevedra, si bien alguno de ellos podrán realizarse a través de internet. Precisamente esta máxima es uno de los argumentos que desde la mutua defienden para el cese de la actividad en la urbe. "Por razones de optimización de recursos y dado que el Ministerio y el Gobierno central quieren intentar apostar por la digitalización; la organización actual queda obsoleta y hay que adaptarla a las tecnologías actuales", exponen las fuentes consultadas del Isfas.
Pero no todos los beneficiarios ven este razonamiento con buenos ojos. Todo lo contrario. "El 90% de los usuarios son jubilados, gente mayor que no emplea internet ni nada por el estilo. Y en muchas ocasiones viven solos o están impedidos y no pueden desplazarse a Pontevedra", narra uno de los afectados, quien apunta que esta delegación, situada en Gran Vía, lleva operativa desde el comienzo de su actividad en toda España. "Esta delegación existió toda la vida en Vigo, gestiona entre 3.500 y 4.000 personas, la mayoría son jubilados, antiguo personal de la Guardia Civil o de la Brilat que vive en la ciudad olívica. Cerró la de Santiago hace un tiempo, pero porque no había casi gente, aquí en Vigo hay muchísimos usuarios e incluso de otras áreas como Tui, Nigrán, etc., que también vienen aquí. La oficina funciona muy bien, estamos encantados con ella y te resuelve muchas cosas. Hay cuestiones de índole personal que un delegado las resuelve de forma ágil pero luego pasaremos a ser muchos", lamenta este usuario.
Y es que uno de los pilares que sustentan esta decisión, que a falta de su publicación en el BOE parece firme, es el elevado número de beneficiarios en la capital provincial en relación a la urbe olívica, favorecidos por la presencia de la Escuela Naval y Militar o la Brilat, entre otras unidades de Defensa. "Como en cada provincia solo suele haber una, se apostó por la de mayor número de mutualistas. Y en Pontevedra hay un colectivo mayor, casi el doble de afiliados y por eso se ha decidido que Vigo se cierre. La repercusión no será tan grande porque seguirán contando con la delegación de Pontevedra", esgrimen desde el Isfas.
Lo cierto es que si bien la vía telemática no es del gusto de los usuarios, también está habilitada la posibilidad de remitir sus solicitudes a través de correo ordinario. Pero esta opción tiene sus límites. La petición de recetas es la gestión más común que se realiza entre los funcionarios de estas oficinas y para su solicitud hay un plazo máximo de 10 días. Su envío por correo postal estaría supeditado al plazo de recepción y en determinadas épocas del año podría demorarse más de la cuenta. Por ello, desde Isfas ya están aconsejando a sus usuarios que estas solicitudes de receta no incluyan fechas.
Trámites presenciales
Otro punto que también compromete a este traslado de competencias es que no todos los trámites pueden realizarse a través de Internet. "Por ejemplo, cuando tienen que solicitar una prestación uno puede digitalizar todo, pero si la factura no es electrónica tiene que presentarse la original o mandarlo vía postal, perdiendo ya toda la atención personalizada", añaden. "Para nosotros no es un tema menor, afecta a cerca de 4.000 personas y a gente muy mayor a la que dejan desprotegida. Aquí lo organizan todo y ahora tendríamos que irnos a Pontevedra y económicamente no compensa. Allí entendemos que hay la Escuela Naval o la Brilat y que son muchos, pero la de Vigo es igual de necesaria. En cada sitio hay una delegación para poder resolver los problemas de la gente que viva allí, ya sean de la Guardia Civil como del ejército de Tierra, Aire o de la Armada. Todavía podemos recuperar esta oficina", confía este usuario, quien ya mantuvo también un encuentro con el alcalde para trasmitirle su preocupación.
