A la hora de diseñar la ampliación del puente de Rande los técnicos trazaron una serie de transfers, plataformas que conectan los carriles exteriores con el tablero central. Su objetivo -según se precisó entonces- es que en caso de accidente las autoridades puedan derivar el tráfico de las "alas" del viaducto a la estructura central. Diez meses después de la inauguración oficial de la ampliación de Rande y a pesar de las críticas de los alcaldes de Vigo y O Morrazo, las plataformas siguen obstruidas por el material que emplean los obreros que aún trabajan en el puente.