El Juzgado de lo Penal número 1 de Vigo ha condenado a una mujer a un año de prisión y una multa de seis euros diarios durante 12 meses por construir sin licencia una vivienda en Nigrán. La magistrada ordena también el derribo de la construcción, un inmueble de 43,4 metros cuadrados (m2) distribuidos en un salón cocina, dos cuartos y un baño, además de una terraza de 28 m2.

La jueza aprecia un delito contra la ordenación del territorio al concluir que el inmueble, que se levantó en suelo rústico no urbanizable, tenía un fin residencial. Aunque la condenada había esgrimido que la vivienda es antigua, la magistrada considera probado que se construyó a lo largo de los últimos seis años. Rechaza además que esté vinculada a una explotación agropecuaria -como alega la propietaria- y precisa que el inmueble estaría permitido para uso de almacén agrícola, no como residencia.

"No nos hallamos ante unas obras insignificantes, irrelevantes o carentes de trascendencia [...]; no son obras de mejora, adecentamiento o de escasa entidad. Son obras de construcción de vivienda residencial, por lo que no pueden ser justificadas o resultar impunes al amparo del principio de intervención mínima", zanja la magistrada. El presupuesto de derribo asciende a 5.457 euros.