Los trajes que los bomberos de Vigo incorporaron a finales del año pasado para la batalla contra la velutina, han incrementado su protección. Se trata de unos buzos de seguridad, compuestos por algodón grueso. Aún así, el aguijón de siete milímetros con el que ataca la agresiva avispa asiática y que introduce con mucha fuerza, puede atravesar la tela y han recibido alguna picadura. La víctima vestía una camiseta bajo el mono, por lo que ahora toman la precaución de ponerse también una sudadera. Y no han vuelto a tener problemas.