Una mujer se encontró ayer en la parroquia de Bembrive a un pitbull que vagaba perdido por la zona. Tras hacerse cargo del perro, de raza potencialmente peligrosa, la señora avisó alrededor de las 17:30 de ayer a la Policía Local, que acudió al lugar.

Los agentes comprobaron que el animal carecía de microchip, un elemento obligatorio y cuya carencia desde la entrada en vigor de la nueva ley de Bienestar Animal está sancionada con al menos 500 euros Al no poder identificar al dueño, la patrulla trasladó al pitbull a la protectora.